Reinventando el subsidio de vivienda en Bogotá

Reinventando el subsidio de vivienda en Bogotá

 

Los subsidios de vivienda son instrumentos para la promoción de equidad social y territorial, y para que las familias adquirieran una vivienda digna. En los últimos años, el Gobierno Nacional ha mejorado su eficiencia, para que cada subsidio adjudicado sea un techo propio.

El balance es positivo. En ocho años se iniciaron 1,8 millones de unidades y la vivienda de interés social (VIS) participó con el 53 por ciento. Sin embargo, en el mismo lapso, 275.000 comenzaron construcción en Bogotá; o sea, en el mejor momento del sector en el país, la capital solo participó con el 15,2 por ciento de la producción total y con el 10,3 por ciento de las VIS.

Además, en las anteriores administraciones, este segmento presentó unos patrones de localización para analizar: en el periodo 2002 – 2010, el 41 por ciento de las VIS construidas en la capital se ubicaron en Bosa, Kennedy, Usme y Ciudad Bolívar. Así, mientras el índice de necesidades básicas insatisfechas registró tasas medias del 13,5 por ciento en la ciudad, en esas localidades fue del 20,1 por ciento, se promovió una localización en zonas vulnerables y la proporción aumentó al 72 por ciento.

Ahora, hay que romper la tendencia. En Lagos de Torca, al norte de la ciudad –que tendrá 60.000 viviendas sociales y prioritarias– aumentó al 40 por ciento la obligación de destinación de suelo para VIS y se prohibió su compensación en dinero o traslado a otras partes. Para ir más allá, el objetivo en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT), apunta a crear subsidios diferenciales de vivienda que promuevan la equidad territorial y, para ello, premiaremos la construcción de VIS cerca de los principales corredores de movilidad y zonas de desarrollo.

GUILLERMO HERRERA
*Secretario Distrital del Hábitat
Especial para EL TIEMPO​

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